HIPOCRÁS: EL VINO RENACENTISTA.
Para cambiar un producto masificado a un producto exclusivo por medio de una relación con el Renacimiento, se me ocurrió utilizar un vino.
Por medio de una investigación descubrí que en el renacimiento existió una bebida a base de vino tinto y miel, con un toque de varias especias llamada HIPOCRÁS.
El origen del Hipocrás se remonta a Hipócrates, quien era un filosófo y médico, conocido como "el padre de la medicina".
En su comienzo era utilizado como un remedio, pero con el tiempo adquirió una gran popularidad entre las masas, fue por esto que modificaron algunos de sus componentes para volverlo exclusivo, por ejemplo, la utilización de azúcar como edulcorante en lugar de la miel, ya que el azúcar era considerada como un lujo reservado para muy pocos.
Entre las especias que acompañan el vino resaltan la canela, el clavo y el jengibre. Para aportarle un mejor aroma se utilizó la nuez moscada y la pimienta negra.
En la parte posterior de la botella se especifica el contenido del vino, la sepa y su procedencia (Italia). Creé los "Viñedos Vitruviales" haciendo alusión Al Hombre de Vitruvio de Leonardo DaVinci, ya que en el, se le muestra gran importancia a la proporcionalidad, al igual que en el Hipocrás, en el cual es fundamental la proporción de las especias según la cantidad de vino y miel o en este caso azúcar.
Es un vino que genera sensación de exclusividad a quien lo consume, es por esto que utilice la imagen de Baco pintada por Caravaggio en el Barroco e hice alusión a que es un vino recomendado por él, quien al ser considerado como el dios del vino y la fiesta, es el mejor juez al momento de elegir un excelente vino.
Por último, su slogan publicitario, en la parte inferior de la botella, indica que al tomar el vino "Te sentirás como los dioses" para reforzar aún más el concepto de exclusividad que ofrece el Hipocrás.
También es importante resaltar la utilización del Hombre de Vitruvio de Leonardo DaVinci en la etiqueta posterior del vino, no solo por su representación de la proporción, ya previamente mencionada, sino también, por su importancia como símbolo por excelencia del Renacimiento italiano y de su creador, el genio de todos los tiempos y el padre del Renacimiento: Leonardo DaVinci.
Para concluir, esta fue la presentación final de los dos productos que debíamos fabricar, ya colocados en el pedestal con sus respectivas fichas técnicas.
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